INTOCABLES 1 - RAYO VATICANO 2

Gozamos hoy de la bienvenida aportación de Guille/Yoko, q esclareció el juego con virtudes de ingeniero: paredes, precisión, apoyos, paredes. Algunos estábamos tan desacostumbrados a estas últimas que las devolvimos con un exceso de ilusión, es decir, fuerte y al cuerpo, lo que no permitió q Yoko rubricara su escapada argelina con un gol al frío.

Valga esta perversión atmosférica como justificante y acicate del ridículo de hoy: derrota ante el colista. El día empezo torcido: Abreu se esfuma hacia aires más benevolos, q tanta inclemencia hace pupita a sus pulmones. Creo q esto terminará de asegurarnos q Abreu mantendrá, de forma definitiva, el glorioso ritmo de acercamiento a su récord de goles.
Se le extrañará dentro y fuera del campo a nuestro goleador, y exponemos sobre la mesa desde ya mismo la planificación de un riguroso proyecto de concentración de equipo en las Benignas Canarias.

Además de la maldición q venía lastrándonos desde el último año-impotencia senil ante el marco rival- hoy nos vimos privados de los codazos y rodillazos de pedrusquets, retenido entre sidras por la omnipresente nieve, y quizá por eso dejamos que la flojera nos arrumbase en dos minicontras, q terminaron con goles en los q Ro quiso y no pudo hacer más, vendido como estaba.

Dicen que el arte es díficil y su recompensa es fugaz. Quizá por eso todos jugamos un tanto a la lotería con la sensual pintura de un gol, y recuerdo tiros lejanos de Panzer Wagen y Yoko como brochazos blancos a la red, un rayajo cruzado de Tira Ya que salió fuera de marco, un borbotón de balón estrellado contra la barrera por Nacho, frustración en general ante cualquier barrera mental o física, creo q nuestro estilete Abreu no llego a lanzar a puerta -lanzado como está hacia ensoñaciones de daiquiri y arena.

Sí quedó una majestuosa pincelada de equipo, donde Guille inventó la jugada habilitando con tino desde la derecha, Tira Ya escurrió el balón entre defensas con genialidad hacia Jaime q, casi a puerta vacía, se llevó la gloria efímera y fácil del gol del empate. Es todo lo que mi mente querrá recordar.