Firmes y en posición, por vez primera en mucho tiempo, los 10 integrantes de Intocables estuvieron presentes en el campo antes del inicio del partido. Tal ejemplo extraordinario -e impensado- de compromiso por nuestra parte tuvo como guinda no ya la victoria, sino la visita de mujer e hijo de Carlos Tirolés Schady -racha que esperamos prorrogar la próxima jornada con la ansiada visita de Tamara y... Ainara! que tendrá la enorme suerte de vivir su primer bautismo verdadero acercándose a los extraños hombrecillos rosas.
Hoy nos enfrentamos a un equipazo que sigue la línea argumental de nuestros rivales -más jóvenes y más en forma- pero la extraordinaria dupla de Tira Ya y Yoko se bastó para adelantarnos, y en uno de sus tuya-mía terminaron por empujar el balón dentro, milagro esquivo para los demás pero costumbre en nuestros cracks, qué tendran éstos q no se les contagia lo nuestro, la inepcia, eso.
No dimos un paso atrás, nos aferramos a la presencia decisiva de nuestros dos cierres, y pusimos línea de tres tapando pases, paredes y florituras dignas de otros, y para no volver sosa la fiesta S.Folleitor presionó desbocado como un mal lateral, alocado y más peligroso que un mono con pistolas, y abrió un pasillo detrás de él q aprovecharon con clase los rivales, clavando el empate raso junto al poste derecho de RoBusquets, vendido.
No nos venimos abajo y seguimos a lo nuestro, presionando al árbitro y cerrando líneas ante la clase rival. Tanto subieron las ínfulas que nos venimos arriba, contra nuestro natural enrocarse atrás y empieza a rezar, y optaron los rivales por el balón al punta forzando uno a uno contra Tirolés y Panzer Wagen, q esta noche tienen derecho a pesadillas, y algún q otro tatuaje en forma de moratón, no se les puede dejar sólos.
Hoy nos enfrentamos a un equipazo que sigue la línea argumental de nuestros rivales -más jóvenes y más en forma- pero la extraordinaria dupla de Tira Ya y Yoko se bastó para adelantarnos, y en uno de sus tuya-mía terminaron por empujar el balón dentro, milagro esquivo para los demás pero costumbre en nuestros cracks, qué tendran éstos q no se les contagia lo nuestro, la inepcia, eso.
No dimos un paso atrás, nos aferramos a la presencia decisiva de nuestros dos cierres, y pusimos línea de tres tapando pases, paredes y florituras dignas de otros, y para no volver sosa la fiesta S.Folleitor presionó desbocado como un mal lateral, alocado y más peligroso que un mono con pistolas, y abrió un pasillo detrás de él q aprovecharon con clase los rivales, clavando el empate raso junto al poste derecho de RoBusquets, vendido.
No nos venimos abajo y seguimos a lo nuestro, presionando al árbitro y cerrando líneas ante la clase rival. Tanto subieron las ínfulas que nos venimos arriba, contra nuestro natural enrocarse atrás y empieza a rezar, y optaron los rivales por el balón al punta forzando uno a uno contra Tirolés y Panzer Wagen, q esta noche tienen derecho a pesadillas, y algún q otro tatuaje en forma de moratón, no se les puede dejar sólos.
Hubo bronca y agarrones, pero no patadas; hubo gritos y protestas, pero no se arrancó ningún Pepe por peteneras y no hubo ningún expulsado, ni dedicatorias cercanas a los genitales, ni alusiones a la caída a los 40, un espectáculo bravío digno de nosotros, q los domingos corremos reventando el frío como Miuras y no entendemos de nimiedades.
Sin embargo los Dioses del fútbol son caprichosos, y no habiendo grandes ocasiones hasta el estertor del partido -hasta dos por cada equipo- sentenciamos en una de las suertes que nos resulta más complicada: el contra-ataque en superioridad numérica.
Fue la jugada de mayor belleza del encuentro, a un sólo minuto del pitido final. TiraYa, Tanqueta y YokoOno, por ese orden, tocaron con rapidez y soltura hasta marcar a puerta vacía, triangulación de lujo, victoria segunda contra quienes nos superan en la tabla, pero no en el cuerpo a cuerpo.
Va por ti, Peter.
O Piotr. O Pedro. Pjeter. Petrus. Te queremos, coño
Fue la jugada de mayor belleza del encuentro, a un sólo minuto del pitido final. TiraYa, Tanqueta y YokoOno, por ese orden, tocaron con rapidez y soltura hasta marcar a puerta vacía, triangulación de lujo, victoria segunda contra quienes nos superan en la tabla, pero no en el cuerpo a cuerpo.
Va por ti, Peter.
O Piotr. O Pedro. Pjeter. Petrus. Te queremos, coño